Si vives con espondilitis anquilosante (EA) sabrás que a veces se hace un poco complicado convivir con esta patología, ya que puede afectarte tanto a nivel físico como a nivel emocional. Por ello es fundamental que te armes de valor para afrontar el día a día y que aproveches todas las herramientas que estén a tu alcance para no dejarte vencer por la enfermedad.
Para ello, para mejorar tu calidad de vida, las visitas al reumatólogo son fundamentales. A través de ellas vas a conocer mejor cómo te afecta esta patología, qué recomendaciones son las más apropiadas para tu caso concreto, y lo más importante, es un momento para pedir ayuda, así como recursos y herramientas que te sirvan de apoyo para vivir mejor con espondilitis anquilosante.
El problema surge muchas veces cuando no sabes muy bien cómo comunicar de forma adecuada al especialista médico tus sensaciones y estados de ánimo o, simplemente, olvidas todas aquellas preguntas que querías hacerle.
Pues bien, gracias a la iniciativa #EspondilitisconFuturo, desarrollada por CEADE (Coordinadora Española de Asociaciones de Espondiloartritis Axial) y Novartis, puedes descargar esta guía sobre cómo preparar adecuadamente tu próxima visita al reumatólogo.
A continuación te adelantamos 3 reglas fundamentales que debes tener en cuenta:
-
Considerar: identifica las preguntas más importantes que quieres hacerle a tu médico.
-
Evaluar: piensa en cómo te afecta la espondilitis para tomar consciencia. Así tendrás menos dificultades para expresar lo que sientes o encontrar las palabras más adecuadas.
-
Prepararte: anota los síntomas, cambios en tu vida, o efectos del tratamiento actual. De este modo no olvidarás ningún aspecto importante y la visita será más fructífera.
Si quieres saber más sobre cómo preparar tu visita al reumatólogo puedes visitar la web de Espondilitis con Futuro o descargar la guía especialmente diseñada para que puedas anotar todo lo que necesites antes de la visita con el especialista.
Desde Tú cuentas mucho esperamos que esta nueva iniciativa te ayude a mejorar tu calidad de vida con espondilitis anquilosante. Además, si te ves con fuerzas, te animamos encarecidamente a poner en marcha alguno de los retos disponibles en la página. ¡Mucho ánimo!
