Si ya has sido diagnosticado con DMAE debes poner especial atención al cuidado de tu visión para evitar que la enfermedad avance más rápido. Por ello, en Tú cuentas mucho, creemos que estas tres recomendaciones básicas te ayudarán a mantener una buena salud visual y paliar el avance o los efectos de la DMAE:
- Visita una vez al año a tu oftalmólogo. Te garantizará un control adecuado sobre el estado de tu visión, el avance o no de tu patología y podrá asesorarte sobre el tratamiento más apropiado para tu caso. Además, será una buena oportunidad para consultarle todas tus dudas sobre cómo mejorar tu calidad de vida y adaptar tu rutina si tienes DMAE.
- Lleva una dieta saludable, con mucha presencia de frutas y verduras. Según diversas investigaciones, los alimentos con alto contenido de vitaminas C y E, zinc y ácidos grasos omega 3 son buenos tanto para la salud ocular como para la salud general4. Así pues los cítricos, los aceites vegetales, las nueces, los cereales integrales, las verduras de color oscuro y los pescados de agua fría son recomendables para mantener una excelente salud ocular.
- Controla los factores de riesgo como los hábitos poco saludables: tabaco alcohol, dieta rica en grasas, etc. Estos cuidados son recomendables para cualquier persona, pero son especialmente aconsejables para las que necesitan cuidar su visión. Puedes encontrar más información sobre los factores de riego de la DMAE en el apartado ¿Existen factores de riesgo de padecer la DMAE?
La DMAE lleva aparejados otros efectos que inciden en la calidad de vida de las personas que la padecen, entre ellos, dificultades para leer, distinguir los colores, reconocer personas… Estas dificultades pueden provocar a su vez efectos secundarios como caídas, aislamiento social, ya que algunas personas no pueden valerse de forma independiente; o en algunos casos, incluso depresión. Sin embargo, estos efectos se pueden mitigar incorporando algunas pautas en la rutina diaria. Puedes consultarlas en la sección: 8 hábitos para vivir con DMAE