La degeneración macular asociada a la edad, más conocida por las siglas DMAE, es una afección común de la vista que se asocia a las personas mayores, a partir de 50 años, y que impide ver los detalles de las imágenes. Afecta a la visión central, por lo que se pierde la claridad de visión y condiciona algunas acciones diarias como leer o conducir.
El primer síntoma para detectar la DMAE es que tendrás la sensación de que aparece una mancha borrosa en el centro del ojo y, a medida que la enfermedad avanza, se va haciendo más grande. También es posible que comiences a ver las líneas rectas torcidas u onduladas.
Estos síntomas los apreciarás en los objetos, ya que te parecerán distorsionados y en los colores, que perderán definición y se verán opacos. Notarás sus efectos también al leer o al encontrarte en un espacio con falta de luz, en el que la distorsión empeorará, así como en tus actividades diarias que necesiten la fijación de la vista. Esta es la causa por la que las patologías asociadas a la visión tienen un gran impacto en la vida cotidiana, pues impiden realizar algunas tareas habituales con normalidad.
Así pues, si has experimentado alguno de estos síntomas, no dudes en acudir a tu oftalmólogo para que te haga una exploración en profundidad y te recomiende la terapia o tratamiento más adecuados para tu caso. Ten en cuenta que la DMAE evoluciona a velocidades diferentes en cada persona y mientras que en unas los efectos son mínimos, otras pueden llegar a perder la visión por completo. Por tanto, es muy importante la detección precoz y el rápido diagnóstico.
Puedes encontrar más información sobre cómo se diagnostica la DMAE en el apartado ¿Sabes cómo se diagnostica la DMAE? También te recomendamos leer Conoce los diferentes tipos de DMAE que existen.