Contar con un nivel de plaquetas menor del normal significa que cualquier hemorragia, por pequeña que sea, puede convertirse en un problema. Enfermedades hematológicas como la trombocitopenia inmune primaria (PTI) pueden ser la causa de estas disminuciones tan pronunciadas de este tipo de células sanguíneas.
Las personas que viven con PTI es muy importante que conozcan en profundidad esta enfermedad, sus síntomas y lo que pueden hacer para mejorar su calidad de vida. Desde contrarrestar los síntomas, realizar actividad física adaptada o una dieta sana y equilibrada, son algunas de las acciones que pueden ayudarles a sentirse mejor.
Por eso, si cuidas de alguna persona que tiene esta enfermedad, debes saber que tú también puedes ayudarle a manejar mejor el día a día con estos consejos:
- ‘Hacer’ es tan importante como ‘estar’: Cuando una persona tiene PTI, su situación y rutina debe adaptarse a las condiciones de esta patología. Ayudarle a ir al médico o llevar el seguimiento del tratamiento es importante, ¡Pero no es lo único que puedes hacer!
Las personas con PTI pueden necesitar apoyo moral y emocional para sobrellevar su situación. Por eso, a veces lo más importante es que cuenten con alguien con quien puedan compartir sus pensamientos, miedos y esperanzas.
- Ayúdales a través del conocimiento: La PTI es una enfermedad rara, por lo que no suele ser demasiado conocida. Además de la ayuda que puedan proporcionar los profesionales médicos con los consejos y las estrategias de tratamiento, comprender la patología y sus detalles puede ser muy útil a la hora de ayudarles a manejarla.
Por eso, debes procurar disponer de información fiable y adecuada que os ayude a entender a ambos la enfermedad, cómo será su avance y qué podéis hacer para que la calidad de vida de la persona afectada no experimente grandes cambios negativos.
Si no sabes dónde encontrar información sobre PTI, empieza por preguntar a tu médico; pero también puedes contactar con asociaciones de pacientes y personas que viven desde hace tiempo con la patología. Conocer el caso de otras personas, te puede ayudar a lidiar con el día a día e incluso darte ánimos en los momentos difíciles.
- Incentiva el autocuidado: Con la información y el conocimiento sobre la patología adecuados, las personas con PTI pueden aprender a autocuidarse, adoptando hábitos más saludables y recomendables para su condición.
Recuerda que el consejo de los médicos y profesionales sanitarios siempre es de gran ayuda a la hora de establecer rutinas y técnicas con las que se puede mejorar el bienestar y la calidad de vida de forma sustancial.
¡Ahora ya lo sabes! Si cuidas de una persona con PTI, puedes marcar la diferencia en su día a día y el manejo de la patología aplicando estos consejos. ¡Esperamos que te hayan ayudado!