Si cuidas de una persona con una enfermedad crónica debes saber que tu papel es esencial en el día a día de la persona a quien cuidas para que tenga una adecuada atención y una buena calidad de vida. Tu apoyo es indispensable para cubrir las necesidades que la persona sola no sería capaz, pero también eres esencial por el apoyo emocional y la compañía que proporcionas a esa persona. En muchas ocasiones quiénes afrontan una patología crónica pueden sentir que están solos ante la situación, y contar con alguien a su lado les ayuda a sentirse mejor y a afrontar los retos de la enfermedad.
Sin embargo, debes tener en cuenta que, para cuidar adecuadamente de una persona con una patología crónica, es necesario también estar preparado; no sólo en el sentido de conocer la enfermedad de la persona bajo tu cuidado; sino también, para aprender a cuidarte tú mismo, ya que de tu bienestar dependerá también el de la persona que cuidas.
Buscar tiempo para tu autocuidado y no dejar de lado tu propia salud, te permitirá dar el cien por cien de ti mismo. Y es que cuidar de otra persona, y teniendo en cuenta cada situación asociada a la enfermedad, puede causar estrés o agotamiento, especialmente en casos de enfermedades crónicas degenerativas.
Por este motivo, desde Tú cuentas mucho, queremos darte algunos consejos esenciales para que estés mejor preparado y aprendas a cuidarte para cuidar.
Así pues, recuerda siempre estos puntos clave:
- Intenta comprender la patología de la persona a la que cuidas. Infórmate sobre la misma para poder ayudar mejor. No dudes en preguntar a los profesionales sanitarios y solicitarles ayuda o fuentes de información.
- Cuida tu propia salud para poder cuidar la de la persona a tu cuidado. No te olvides de llevar una dieta sana y mantener una actividad física regular.
- Aprende a reconocer los síntomas del estrés o la ansiedad provocados por el difícil manejo de la enfermedad o la falta de tiempo, y busca la forma de controlarlos o pide ayuda, si crees que no puedes hacerlo solo.
- No te sientas mal si necesitas pedir ayuda. Abordar una enfermedad crónica es difícil, porque se trata de una condición de por vida y, dependiendo de la patología, puede suponer un desgaste físico y emocional muy fuerte; por tanto, ¡no te sientas mal si necesitas apoyo tú también! Ya eres un héroe con todo lo que aportas.
Estos son unos consejos básicos que puedes poner en práctica, pero tienes más en estos artículos: si cuidas a una persona con insuficiencia cardíaca o con Alzheimer.
Si cuidas de la salud de una persona, no te olvides de la tuya propia para poder cuidar la de los demás, y no dejes de dedicarte un poco de tiempo a ti mismo.