Actualmente, no se conoce con exactitud cuáles son las causas de la aparición del melanoma, por tanto, no es posible asegurar si una persona tendrá melanoma o no; pero sí se han identificado algunos factores que hacen más probable su desarrollo en determinados grupos de personas. Esto no quiere decir que, si estás dentro del grupo de personas, vayas a tener melanoma; pero, si has observado algún síntoma, tu médico los tendrá presentes a la hora de realizar el diagnóstico.
Te contamos cuáles son los factores de riesgo del melanoma:
Exposición a la luz ultravioleta UV.
La luz solar es la principal fuente de irradiación de este tipo de luz, pero también las lámparas de autobronceado. Se ha observado una relación entre la aparición de melanoma y la exposición a este tipo de luz. De ahí la importancia de una protección adecuada ante este tipo de luz para la prevención del melanoma.
Presencia de lunares y lunares atípicos (nevos displásicos).
Muchas personas tienen lunares y la inmensa mayoría son benignos, pero en algunos casos estos pueden ser un síntoma de melanoma. Te contamos cómo diferenciarlos en este artículo:
Tipo de piel.
Las personas de raza blanca con piel y ojos claros y cabello rubio o pelirrojo tienen más posibilidades de desarrollar melanoma.
Antecedentes familiares.
El 10% de las personas con melanoma tenían antecedentes familiares. Es más frecuente la aparición de melanoma en personas con antecedentes familiares de melanoma. También, si previamente has tenido melanoma, tienes un mayor riesgo de volver a desarrollar la patología.
Edad.
Los grupos de edad con mayor riesgo de melanoma se encuentran entre los 30 – 60 años. En niños es una patología que rara vez se diagnostica.
Género.
No existe diferenciación entre la incidencia del melanoma en hombres y mujeres, pero sí se ha observado una diferencia entre las partes del cuerpo en las que se localiza el melanoma en hombres (tronco, cara, cuello y hombros) y mujeres (extremidades inferiores).
Determinadas enfermedades
como el Xeroderma pigmentosum, se asocian con un riesgo más elevado de melanoma, ya que sus células son incapaces de reparar los daños que ocasiona la radiación ultravioleta. Para estas personas, el riesgo de melanoma en edades tempranas es 2.000 veces mayor que en el resto de la población.
Sistema inmunológico debilitado.
Las personas cuyos sistemas inmunológicos se han debilitado por diversas causas (enfermedades o tratamientos médicos) tienen más probabilidades de desarrollar este tipo de cáncer.
En España se registran cada año unos 5.000 nuevos casos de melanoma, y a pesar de ser uno de los cánceres de piel menos frecuentes, es responsable del 80% de las muertes relacionadas con el cáncer de piel1. La detección precoz es fundamental, ya que si se detecta en fases tempranas tiene muchas posibilidades de curarse. Así pues, infórmate y conoce mejor el melanoma para aprender a detectarlo a tiempo.